– El Plan de Fomento Productivo Intercultural (PFPI) fue financiado por la empresa de energía renovable Innergex e impartido por la Facultad de Agronomía de la Universidad de Concepción.
Mayo 2025, Los Ángeles: En la sede de la Universidad de Concepción en la comuna de Los Ángeles se realizó la ceremonia de cierre del curso “Plan de Fomento Productivo Intercultural”. La capacitación fue dirigida a las familias de la Comunidad Indígena de Los Boldos y Corte Lima, y consistió en un plan de estudios que duró tres años y que fue diseñado exclusivamente para ellas abordando sus necesidades y desafíos en los cultivos, y las tradiciones pehuenches, con el objetivo final de mejorar la calidad de vida de los integrantes de la comunidad indígena preservando la estrecha relación de la cultura mapuche-pehuenche con la tierra.
El Plan de Fomento Productivo Intercultural es una iniciativa creada y desarrollada por Innergex, empresa de energía renovable, y la propia comunidad, y fue ejecutada por la Facultad de Agronomía de la Universidad de Concepción.
“En Innergex estamos convencidos que cuando los esfuerzos son compartidos el resultado siempre es mejor, por esta razón, es que junto a la comunidad y a los académicos de la Universidad de Concepción trabajamos durante 3 años en el Plan de Fomento Productivo Intercultural, un programa de estudios pionero, el cual integra los conocimientos técnicos agrícolas y la tradición y cultura mapuche-pehuenche. Participaron las familias completas, incluidos los niños, a quienes se les integró de manera especial enseñándoles vocabulario mapudungún e historias de sus ancestros para que la cultura de su pueblo continúe de generación en generación. Este programa fue dinámico y fue evolucionando a través de los 3 años de duración, lo que va a permitir replicarlo en otras comunidades indígenas donde Innergex tiene presencia” dijo Alejandro Donoso, Gerente de Sustentabilidad y Asuntos Corporativos de Innergex.
La capacitación fue entregada de forma gratuita para los integrantes de la Comunidad Indígena de Los Boldos y Corte Lima. Algunos de los contenidos incorporados en el plan de estudios fueron el manejo de huertos, poda, combate y prevención de plagas y fertilización orgánica de la tierra. Además, aprendieron a preservar los alimentos cosechados durante el verano para consumirlos en invierno, por medio de técnicas de conservas y encurtidos.
Guillermo Wells, Decano de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Concepción manifestó que, “esta iniciativa se trabajó a nivel productivo e intercultural mediante capacitaciones, días de campo y talleres participativos. Se elaboró una malla curricular construida de forma participativa, mediante un proceso de diagnóstico cultural y productivo en conjunto con la comunidad. Se identificaron temas prioritarios desde la experiencia de los propios habitantes y se relacionaron con áreas técnicas pertinentes al ámbito agrícola, como el manejo de suelos, sistemas de riego, horticultura, praderas, conservación de semillas, agroecología, bioeconomía y gestión”.
Como parte de las actividades del programa los estudiantes además realizaron diversas “giras” que consistieron en visitar a diferentes agricultores de la región con la finalidad de conocer nuevas experiencias y construir redes de cooperación.
Académicos de la Universidad de Concepción, específicamente de las Facultades de Agronomía y Educación, continuarán trabajando este año con la comunidad Los Boldos que residen en San Carlos de Purén y Corte Lima, para capacitarlos en áreas relacionadas con el mundo agrícola y la revitalización de su cultura.
El proyecto denominado Plan de Fomento Productivo Intercultural, finalizó su segunda temporada el pasado mes de marzo ocasión en la que realizaron el llamado Trafkintun.
“El hecho de finalizar la actividad del 2023 en marzo pasado y comenzar el nuevo ciclo ahora en abril no es azaroso, ya que se condice con los ciclos naturales de la naturaleza, lo cual va en armonía con la forma de vivir de los pueblos originarios, en este caso la comunidad Los Boldos. Así el otoño o rimü es el tiempo de preparación y la tierra se prepara para la finalización de un ciclo. Se finalizan las cosechas y se guardan los productos para el nuevo año de vida. Por ello hicimos un Trafkintun o Trankitun cuyo propósito es compartir aquello que hay en abundancia ya que es un momento de intercambio de productos, animales, plantas, yerbas, tejidos entre otros. Fue un momento muy especial de encuentro, donde llevamos fotografías de las actividades realizadas durante el año, e intercambiamos experiencias, cerrando la actividad con la socialización del plan a trabajar en para este tercer ciclo”, puntualizó la académica, Dra. Susana Fischer Ganzoni.
El tercer año de trabajo comienza en abril, donde se considerará, desde el punto agrícola, trabajar tres grandes áreas, según lo explicado por el académico y director del Departamento de Producción Vegetal de la Facultad de Agronomía, Dr. Antonio Pinto Rodríguez. “La primera área o módulo a abordar se relaciona con la bioeconomía, que tiene que ver con la sostenibilidad, la sustentabilidad y el medio ambiente. De este modo nos aproximaremos a los sistemas productivos lo más amigable posible y en armonía con la naturaleza, como lo visualizan en su cultura. La segunda área comprende la transferencia tecnológica agrícola, pensando en sus hortalizas, cultivos y praderas, y el tercer módulo a trabajar tiene que ver con la búsqueda de nuevas alternativas productivas para ellos, ya que están muy motivados, por ejemplo con el área de sus plantas medicinales, y a partir de ellas no solo quedarse con la deshidratación de estas, sino que tratar de agregarles valor, por lo que trabajaremos con ideas de elaboración de cremas o jabones entre otras iniciativas que puedan comercializar”.
De acuerdo con lo señalado por los expertos, también reforzarán el área intercultural, aspecto que coordina el profesor Rodrigo Cea Córdova de la Facultad de Educación de la UdeC y quien este año se enfocará en trabajar con los niños. “Ellos están muy interesados en recuperar su cultura y lenguaje. Los niños con los que se trabajará son de tercera generación por lo tanto muchos ya perdieron el idioma y por eso se trabajará en este aspecto para no perder las tradiciones”, puntualizó el Dr. Antonio Pinto.