La Dra. Cristina Muñoz, del Departamento de Suelos y Recursos Naturales de Agronomía UdeC, es una de las 15 seleccionadas entre académicas y estudiantes de postgrado que fueron reconocidas con pendones mostrando su trayectoria y proyectos de innovación que han derivado en emprendimientos.
Hasta este 8 de marzo se encontrará la muestra gráfica “Mujeres UdeC en Innovación y Emprendimiento”, en el frontis de la facultad de Ciencias Químicas, organizada por el Proyecto InEs de Género, la Dirección de Innovación y Desarrollo de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VRID), la Oficina de Transferencia y Licenciamiento e IncubaUdeC que permanece en Concepción.
Se trata de exponer y evidenciar la experiencia tecnológica de una línea investigativa que en el caso de la Dra. Cristina Muñoz se relaciona con tecnologías asociadas a Biochar.
La académica destacó la importancia de este reconocimiento “esta es una instancia gratificante de reconocimiento donde se destaca el rol de las mujeres para generar ciencia e innovación, lo que dando un paso más adelante, se materializa en la formación de empresas o servicios destinados a resolver una problemática actual. El apoyo de la Universidad ha sido fundamental en este tránsito, y el contacto con el medio permite la transferencia de las tecnologías generadas. Me siento feliz de ser reconocida y espero que más mujeres se atrevan a superar los obstáculos, temores o desigual recarga laboral-familiar, para construir una sociedad más equitativa que releve el aporte de la mujer en los diferentes ámbitos”.
Por el desarrollo de tecnologías relacionadas con mallas foto-selectivas para enfrentar el cambio climático en la fruticultura, el ingeniero agrónomo y académico del Departamento de Producción Vegetal de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Concepción, Dr. Richard Bastías Ibarra recibió el Premio Nacional de Innovación (Avonni) categoría ANID RedGT.
Este premio es el reconocimiento honorífico más importante de Chile, que busca visibilizar los casos de éxito que están creando valor mediante la innovación en distintos rubros y categorías.
Respecto de la importancia de recibir este premio, el académico sostuvo que, “es un punto de inflexión ya que marca un hito muy importante al trabajo y esfuerzo que hemos realizado como equipo de fruticultura en el desarrollo de esta malla foto-selectiva, que hoy día se ha transformado en una herramienta útil para los agricultores y productores de fruta a nivel nacional e internacional, permitiéndoles enfrentar el clima como una amenaza que hoy está poniendo en jaque la sostenibilidad de este rubro y de la producción de alimentos en general, en términos de aseguramiento, de rendimientos, y de calidad de la producción. Creo que este reconocimiento premia un trabajo de más de 10 años que nació bien incipiente pero que hoy, al adjudicarnos este premio que es el más importante a nivel nacional en innovación, es un orgullo ya que da cuenta que esta tecnología se está transfiriendo y que se está aplicando”, explicó el Dr. Bastías.
Sobre el punto de inflexión, el académico también señaló que como grupo de investigación deben continuar avanzando. “Es como una inyección de energía para seguir avanzando en el perfeccionamiento de esta tecnología para pasar a una etapa 2.0 que implica sofisticarla y responder a los actuales y futuros desafíos de la fruticultura que exigen el desarrollo de sistemas productivos más sostenibles y resilientes, en dónde la innovación jugará un rol fundamental; ese es el principal desafío que nos deja este premio”.
Finalmente, el Dr. Bastías agregó que, “quiero agradecer a mi equipo de trabajo del laboratorio de fruticultura, a mi Departamento y Facultad, al equipo de la OTL UdeC y del HUB-Apta, y por sobre todo a mi familia, cuyo logro no habría sido posible sin el apoyo de cada uno de ellos”.
El evento organizado por la fundación ForoInnovación; el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación; El Mercurio y TVN, fue realizado en Santiago, hasta donde llegaron diversas autoridades, incluyendo el Rector de la UdeC, Dr. Carlos Saavedra Rubilar.
Ignacio Bustos, titulado el año 2018 de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Concepción es quien recientemente se adjudicó el primer lugar nacional de proyecto de innovación de la Fundación para la Innovación Agraria, FIA, con su proyecto que apunta a generar un prototipo para el desarrollo de un sistema productivo para la obtención de morchella, hongo que a nivel mundial es considerado como un producto gourmet de lujo.
“Hemos establecido junto a mi socio una alianza entre “Morel’s House Ltda” nuestra empresa postulante y a su vez ejecutor, y la UdeC a través de la Facultad de Agronomía colaborando como asociado, ya que la idea es que exista un equipo técnico de trabajo completo, para abarcar áreas relativas al crecimiento de los hongos, inocuidad y calidad de producto y otros aspectos relevantes”, explicó el ingeniero agrónomo, Ignacio Bustos.
Se trata, de acuerdo a lo manifestado por el profesional, de desarrollar un sistema productivo para la obtención de morchella en condiciones controladas. “Queremos dar solución a algunos problemas presentes en el rubro agroalimentario. Por ejemplo, queremos contribuir a solucionar el problema relacionado a un bajo desarrollo tecnológico en técnicas de producción de productos forestales no madereros, para definir y sistematizar los estándares de inocuidad y trazabilidad para el sistema productivo que queremos implementar, como también cumplir con certificaciones comprometidas en materias de responsabilidad ambiental y social”, explicó Ignacio Bustos.
La morchella en Chile presenta fluctuaciones en rendimientos año tras año, ya sea en su ecosistema nativo u originada por efecto de los incendios forestales, significando un problema en cuanto a la estabilidad de la recolección como fuente económica y laboral. “Es importante mencionar que desde el 2010 a la fecha, las toneladas exportadas de este producto han fluctuado entre 40 a 120 toneladas. Hay años en que ha aumentado positivamente el volumen exportado de morchella como también otros en que disminuye, entonces, uno de nuestros objetivos será intentar dar estabilidad y constancia en productividad y provisión respectivamente”.
Es uno de los grandes objetivos a alcanzar, según Ignacio Bustos, porque además se entiende que existen muchas familias que viven de la recolección y en este sentido también han pensado en ellos. “De lograr implementar un sistema productivo queremos generar una industria de producción de morchella que coexista con la recolección comercial, para que en un posible futuro junto a recolectores de la región, podamos exportar a Europa, siendo este el principal mercado de destino para morchella. Queremos generar impactos positivos del tipo social a través de la generación de empleos, responsabilidad ambiental mediante una economía circular, crecimiento económico y desarrollo cultural”, precisó Ignacio, agregando que, “para ello, pretendemos conseguir una estabilidad en los rendimientos queriendo lograr inicialmente un promedio que puede ir desde los 2.000 a los 3.000 kilogramos de morchella fresca por hectárea, bien sabemos que es posible también aumentar ese margen de rendimiento, pues requiere de mayor investigación e inversión, por lo mismo, ahora estamos enfocados en concretar la implementación y funcionalidad del sistema productivo”.
El llamado a concurso de FIA fue una convocatoria nacional para proyectos de innovación en el sector agrícola, agroforestal y agroalimentario y para el ingeniero agrónomo, “esto puede significar un gran inicio para dar otro salto dentro de esta iniciativa, ya que el financiamiento que obtuvimos ($150.000.000) lo utilizaremos para la adquisición de tecnología, equipamiento e insumos para la producción de morchella”.
Quien ha colaborado significativamente en este proyecto es la académica del Departamento de Producción Vegetal, Dra. Macarena Gerding, quien destacó la importancia de este trabajo. “Sería la primera vez que se lograría cultivar en el hemisferio sur, uno de los hongos más caros que existen a nivel mundial, de hecho es el segundo después de la trufa. Este es un hongo que se ha logrado cultivar con manejo en Francia y China y aquí en Chile se basa exclusivamente en la recolección en bosques y por lo tanto no se logran altos volúmenes, entonces sería una muy buena oportunidad para nuestro país y también sería una oportunidad para la comunidad de Nacimiento, donde está ubicada la empresa de nuestros ex alumnos”.
Finalmente mencionar que Ignacio Bustos junto a FIA se encuentran en proceso de negociación para convenir la adjudicación de financiamiento para la ejecución del proyecto.